Porque en la poesía somos más que casualidad del
efecto. Con António Reis comparto más que el país de origen, la lírica y la
pasión por el cine. Ambos valoramos el fruto, el tiempo de quien queremos. Hoy,
con esta traducción, este poema también es mío.
No he dormido todavía
Sólo en la cama
el tiempo
aún es mío
como la palabra
discretamente
me muevo
en el colchón
No pienso en Dios
en la muerte
Imprimo
Me caliento
Escucho
Conservo la posición
Elsa está durmiendo
Sólo en la cama
el tiempo aún es suyo
como un fruto
António Reis, in
'Novos Poemas Quotidianos' (trad. Luis Leal)